LA PRECIOSA SABIDURÍA DE MI PADRE

...Hoy, al ver el rostro de mi hijo, de reojo, viéndome con cara de extrañeza al verme tumbado sobre mi cama, con cara de preocupación, mis piernas estiradas y entre cruzadas, uniendo entre si, cada uno de mis dedos, con la mirada fija y perdida en un punto en la nada, sin parpadear...
              Eso me hizo recordar a mi difunto padre, que en su vejez, hacia exactamente lo que yo estoy haciendo; pero en la madurez de mi existencia, con los problemas cotidianos que la vida propia de cada quien traen consigo... En aquel momento, me hacia quizás la misma pregunta que mi hijo se hace hoy: Qué le pasará a mi padre?.. Dónde anda mi padre con sus pensamientos?... Al verme sorprendido por él, esboce una sonrisa, a lo que mi hijo preguntó; Todo, está bien? y yo al igual que mi padre no le respondí, solo le hice una mueca con mi boca, una sonrisa tímida: llena de dolor, de nostalgias, de deseos, de cosos inconclusas, una sonrisa como la de la mona lisa de Leonardo. Que solo es una mueca, pero dice tantas cosas... Para luego pasar a mi letargo nuevamente.
               Entrando de nuevo en el letargo que la soledad te permite, me fui de ese  tiempo y lugar, viajando en el tiempo a lugares ya vividos, momentos hermosos que tu mismo te forjaste en algún punto en el tiempo de tu vida ahí me sentía cómodo, sin problemas, con salud, trabajo, amigos, amigas, libertad, solvencia y algo mas, quizás el mas importante FUTURO, ese que ahora en el presente, ya solo es una forma de vida digna de esperar el final. Pero entiendo eso en mi padre, pues él en esos momentos en que lo descubrí aletargado, él ya era un hombre septuagésimo, yo apenas tengo 4 décadas y media; y porqué me siento así? reflexioné. De inmediato me introduje nuevamente en mi tiempo y espacio, ese tiempo y espacio del que no hubiera haber querido salir, en ese punto en el cual estaba trabado mentalmente. Viviéndolo de nuevo pero, con un ingrediente nuevo, que en aquel momento no tenia para darle el sabor necesario a la vida y así entonces, poder seguir en el presente: lleno de vitalidad y energía y no estar tirado en mi cama, en mi cuarto, dejando simplemente pasar el tiempo, ese ingrediente que me hizo falta...Y era la experiencia!. Si! la experiencia que paradójicamente solo el paso del tiempo sobre la línea de la vida te da. Experiencia, esa que ahora tengo, pero que nadie quiere, y esa que ni a mi me sirve, pues ni siquiera para conseguir un trabajo es ingrediente vital, dónde estuvo cuando la necesite?, donde estuvo cuando me la exigieron?. Estaba en el futuro, presente actual, y como la llevaba conmigo 20 o 30 años a tras. Como!, que injusta la vida; cuando no la tienes la ignoras, precisamente por lo mismo. Y  cuando la logras, ya no te sirve, ya nadie te necesita. Pensé, cual era entonces la solución a este paradigmático y paradójico problema. Acaso hay una solución? Si quiero compartirla con alguien, en este caso mis hijos, para ellos son solo tonterías de papá: actualizate viejo!, padre, tu estas en otra onda!, viejo, esos fueron otros tiempos!, tranquilo ruco, actualizate! 
              Esto es una pesadilla, la misma que mi padre vivió, viendo aquel punto sobre la pared del que tantas veces fui testigo, sin entender o mas bien sin darle la importancia, a tanto abundancia de conocimiento. Conocimiento recibido a prueba y error y es que, la mejor universidad... es, la vida propia. Que hago? estoy al igual que mi padre con aquel hermoso y frondoso tesoro que tengo en mi mente, acaso se ira conmigo a la tumba sin ver la luz, que hago Dios mio! 
              Dejaré, que la vida siga su rumbo, que las aguas fluyan, que todo vuelva a su cause, que cada quien construya su propia experiencia, que viva cada quien de sus propios éxitos y fracasos, que cada quien busque y encuentre lo que tanto añora. 
             Con la esperanza de que algún día, alguien tome  aquel tesoro de cualquiera que se encuentre en mi situación actual. 
             Cada quien se forjara su propio destino, sea este el correcto o el incorrecto; algunos encontraran el éxito, otros morirán en el intento, otros morirán sin saber que buscaban.                    Pero, lo mas triste seria, que otros mueran sabiendo que lo encontraron, pero que no tuvieron el tiempo de pasarlo....



SergioRaga 04.02.14