viernes, 15 de agosto de 2014

¡¡OYE!!

Esa tarde, sentados frente a frente, ella se encontraba muy callada; habia perdido la alegría que siempre la caracterizó, algo en su personalidad que de ella me enamoro, entre otras cualidades. Yo que la contemplaba y seguía pensando el lo bella que era.
_¡Oye!... Dime que sucede. Ella levanto su cara y no dijo nada, su mirada era muy triste.
_¡Oye!... Piensa bien lo que me dirás... Pues, creo que hay alguien mas... ¿Verdad? 
Pero de sus labios, ni una palabra, sus ojos denotaban una profunda tristeza.
_¡Oye!... Sabes que soy el único que te entiende. _¿Qué sucede?... ¡Habla por favor! Una vez más, su cara bajo y  una lagrima nació de sus ojos. Entonces si que me preocupe y le dije. 
_¡Oye!... ¿Qué te pasa hoy que te veo tan cambiada? Por un rato quiso esbozar a una tímida sonrisa, pero nada.
_¡Oye!... Te pido perdón, si en algo he fallado... _¡Vamos mírame, que me puedes pedir, si todo te lo he entregado... Piénsalo bien, que ha sido con mucho amor y si hay alguien mas; que es lo que presiento, ten mucho cuidado, bien sabes que conmigo lo tienes todo y al perderme no tendrás nada.
_Oye... Que soy el único que te entiende... _El único que siempre te ha amado... ¿Qué mas puedes pedirle a otro? ¡Que yo no te halla ya dado!
_¡Oye!... ¡Dime ya! Que es lo que te pasa amor y si hay un tercero entre nosotros por favor... ¡Dímelo ya! 
Ella reacciono por fin y se acomodo en su silla; tomo un suspiro y se limpio sus lagrimas, me vio fijamente a los ojos; yo que en ese momento, después de tanto insistirle con mis preguntas y advertencias, me entro un miedo por lo que de su boca estaba por salir. _La verdad ya no quería que hablara, pues presentía lo peor. Pero, mi temor se concreto y ella empezó a hablar...
_¡Óyeme que tengo algo importante que decir! Algo, que me ha tenido muy asustada pensando en tu reacción... Todo este tiempo que he estado aquí callada frente a ti, era para tomar valor y asegurarme si todavía, podría haber amor entre nosotros. Se callo nuevamente, pero solo para limpiar sus ojos y aclarar su vos, luego prosiguió.
_¡Oye!... Si, efectivamente tu miedo tiene fundamentos, pues.... Aclaro a su angustiado tono de vos  y siguió con ésto. _¡Si hay un tercero! que se ha venido a interponer entre tu y yo y, creo que...
_Oye espera no digas nada... Solo quiero que por favor, recuerdes que como yo nadie te amara, hice mi último intento antes de recibir el zarpaso final.
_¡Oye!... Por favor no me vuelvas a interrumpir, pues para mi esto ya es muy dificil, lo que te estoy a punto de confesarte. Cuando iba a interrumpirla nuevamente; coloco a su dedo indice sobre mi boca  para impedirme hablar.
_Oye bien por favor, pues si, es correcto lo que piensas... llego alguien que puede separarnos para siempre... 
Sus ojos no dejaban de emanar lagrimas y su vos estaba a punto de quebrarse pero aun tuvo fuerzas para terminar.
_¡Oye!... ¡amor!... ¡estoy embarazada! 
Ambos enmudecimos, ella agacho de nuevo su cabeza, avergonzada y yo muy tiernamente con mi mano levante a su preciosa cara.
_¡Oye amo!r... ¡Esa es la mejor noticia que pudiste haberme dado! 
Ella me sonrió, volviéndole el alma a su cuerpo, me acerque y con la mayor ternura, la bese. 
Despues de demostrarnos nuestro amor, decidimos irnos de allí y a su casa nos dirigimos para hablar con sus padres y ante ellos, mi amor completo entregarle.


inspirado en la canción: Oye de S. Fashelli.








No hay comentarios.:

Publicar un comentario