martes, 28 de julio de 2015

El Primer Fraude Electoral


En algún lugar de nuestro lindo planeta, en un tiempo muy remoto, ya por todos olvidados, aunque debo decir que habrá quien diga; ¡yo viví esa aventura, esa trampa! y lo dirá con indignación y creo que le daré toda la razón.
Eran tiempos diferentes, en éste lugar, había riquezas por muchos envidiadas, pero en esos tiempos ya se escuchaba de ideas importadas, las cuales, de ninguna razón podían llegar a ese país, había que hacer lo que estuviera al alcance para evitar esa ideología en él entrara. 

Y las potencias se dividieron, unos en el capitalismo, otros en el socialismo, pues había nacido el comunismo, ideas raras para parte de una nación, pero no tan mala para otros que en ella tambien moraban y veían con esas ideas llevar una vida digna, aunque la vida no era mala para ellos, pero cuando se ven brillar luces en el horizonte, todos piensan, a veces por ignorancia, que debe de ser oro, pues es bien dicho; "que no todo lo que brilla es oro".

Habían gobernado en ese país, civiles y militares, derecha y centro, jamas izquierda, la verdad en esos tiempos nadie sabía a que se referían con estas expresiones políticas, pues pareciera ser todo ultra secreto, en fin, cuando ésto acontecía, en ese lugar era tiempo de elecciones y entre los candidatos había alguien que simpatizaba con esas ideologías nuevas para la ciudadanía de ese lugar. Otros, los tradicionales, se negaban que esa doctrina a ellos llegara y entre los candidatos un militar, representando a una nación, ahí adentro y posiblemente de afuera un gobierno ya existente. 

El problema era que según las encuestas, unas hechas a voz, pues en esos tiempos no existían empresas que de eso vivieran, más bien, eran encuestas de esas, a voces, ya sabes; ¡yo votaré por mengano!, ¡y yo por zutano!, ¡yo por fulano!, Esas eran las encuestas de la época, tambien estaban las otras que decían: ¡Mi padre votará por Fulano! y el resto de la familia deberían de hacerlo, lo dicen, por respeto a quien manda y querrá lo mejor para su familia, había que respaldar dicha decisión aunque ésta fuera equivocada.

Los militares, quienes temían por perder las elecciones y sus maravillosas formas de vida con la entrada de esa forma de pensamiento, según ellos y muchos más; tan absurdas. Se preguntaban; ¡ese tal por cual, va encabezando las encuestas!, ¡si va a la cabeza!, ¡seguro ya nadie podrá ganarle en éstas elecciones! ¡si ese tal por cual gana, estaremos bien fregados, pues seguro el comunismo tendrá cabida en nuestra morada!e

Éstas eran las penas y preocupaciones de los representantes del gremio castrense; había que hacer algo y eso era; ¡yá! pues, no faltaba mucho para a las urnas su voto entregar, en una contienda limpia como la habían sido todas las anteriores.

Alguien, sentado en el lado oscuro del cuarto, lugar en donde se llevaba a cabo dicha discusión, dijo: ¿Y si hacemos fraude? uno de los ahí presentes se levantó y a la librería del cuarto al diccionario corrió a buscar, para entender lo que dijo quien de la oscuridad salia y entre la penumbra se asomaba. Entre los ahí presentes no todos eran ignorantes, algunos supieron a que se refería ese que hasta ahora veían, a pesar de que en todas las sesiones siempre con ellos ahí estuvo; por ahí, sin hacer ruido.

¡Eso es inconcebible! dijo el candidato castrense, ¡yo quiero ganar, pero a la buena!, el que en lo oscuro estuvo, dijo; ¡vea mi general, eso ya no es posible y es la única solución! Mientras el desconocido convencía al general y a otros en el lugar, él que buscaba afanado en diccionario la palabra "fraude" al fin dió con ella, luego de encontrar la palabra y leer la explicación o definición o significado, para el caso es lo mismo. 

Se pronunció, con seño fruncido; ¡Yo me opongo tambien, el general deberá de llegar a la presidencia pero constitucionalmente, elegido democráticamente! Eso dijo y azotó el libro cuando lo cerró, para colocarlo una vez más en el librero que se encontraba en la pared sur del cuarto. El oscuro siguió con su argumento y es que él tenía razón, ya el palacio tenía dueño, o como diría un político exiliado; ¡la guayaba tiene dueño!

¡Vea general, ésto no es nuevo, se ha usado en las más grandes democracias, todo sea para evitar que ese mal llegue a nuestra morada! Luego de un silencio, algunos accedieron y estuvieron de acuerdo, sin embargo el general y otros seguían inseguros, no muy convencidos; eran militares y personalidades de la sociedad civil de ese país, aún con dignidad e integridad y respeto para ellos y para el pueblo que deseaban gobernar. El oscuro, continúo. ¡Tengo amigos en la CIA y ellos nos dirán como el fraude hacer sin dejar rastro alguno! ¿la CIA? dijo el militar que quería ser presidente, mientras tanto el tipo del diccionario de hace un rato, lo extrajo de nuevo de la librería y como loco, buscó esa palabra; claro, él la que encontró fue: "Silla" y antes de emitir palabra meditó por buen rato, ¿qué tiene que ver una silla en ésto" ¿ademas, será silla de mesa o silla de caballo? he ahí el dilema del político y con astucia seguía busca y busca en el diccionario.

Dijo el general: ¡No quiero deberles nada a esos gringos y menos meterme con esos de la CIA!, ésto le dió más curiosidad al político, quien no sabía de que se hablaba y le urgía dar su opinión.
¡Recuerde que no por gusto son la agencia de inteligencia del país más poderoso del mundo y, ellos ya han sentado en la silla presidencial a quienes les ha convenido, mi general! ¡Ah, esa CIA! dijo el político y azotó de nuevo el diccionario y lo colocó en la librería, en la pared que da al sur de la habitación.

Luego, afinó su voz y dijo. ¡Mi general yo estoy en desacuerdo con eso del fraude, pero si no hay otra opción, que le hable a los de la "silla" la de esos gringos!, y agregó: ¡Todo sea por la nación y la libertad de nuestro bello país!, entonces todos estuvieron de acuerdo y aquel se salvó de que lo tildaran de burro, si hubiera hecho algún comentario cuando pensó en "silla" en lugar de las siglas en ingles: CIA.  

El secretario de la campaña del general y el oscuro hicieron contacto con el jefe de la CIA, alguien que aborrecía a la dichosa idea comunista y de una, mandó a ese país a dos de sus mejores agentes, para dar apoyo y en la guayaba sentar al general.

En los días restantes, se dedicaron a llevar a cabo la estrategia para cometer el primer fraude en esa nación. Los gringos de la CIA, al ver las condiciones de ese país, pensaron en una de las estratagemas más antiguas, pero que dieron excelentes resultados en los primeros fraudes.

¡No se diga más, éste es el plan! Se dieron las instrucciones y al día siguiente salieron muchos militares vestidos de civiles, pues no podían usar a simpatizantes del partido pues, entre ellos había gente digna y correcta, no se podían correr riesgos y los soldados, bueno ya conocemos de esa disciplina, que no haré comentarios.

Los meses fueron arduos, pero dieron frutos, pues llegó el día de las elecciones y el general ganó, con una arrolladora ventaja a quien se daba por sentado y asegurado que sería el siguiente presidente de ese país de alguna parte del planeta. Fue tan bien elaborado el plan, que el candidato, el  realmente ganador, llegó y a su contrincante felicitó, por ganarle a la buena y a sus ordenes él se colocó y embajador por el general éste fue nombrado en un país lo más retirado, para que él nunca pudiera darse cuenta de lo que ahí se había fraguado y había pasado. 

El general gobernó durante todo su mandato y mientra gobernó, escudriñó quienes eran seguidores de esa idea comunista y con ayuda de la CIA a los de las guerrillas eliminó. En las siguientes elecciones, el general se aseguró de que no llegará otro candidato por la vía legal, para no perder lo que él había logrado, casi terminar con quienes ya amaban a el comunismo y en esas otras elecciones, otro militar de la guayaba se apoderó, otro fraude se fraguó y éste tambien fue algo bien planificado no así los que hubo después, pues por ese país mucha sangre se derramó y hubo necesidad de hacer muchos golpes de estado, para mantener la soberanía que según ellos, se había logrado. 

¡Ya sé! te estas preguntando ¿cómo fue llevado a cabo el primer fraude electoral? ¡Ahora te lo cuento! fue algo maquiavélico, pero verás, que un plan muy bien planeado por los de la CIA que a todos callados y sin protestar aceptaron la victoria de aquel general.

El plan:
Llegaron los soldados vestidos de civil a todos los rincones del gran país, no así en la capital del lugar, aunque ahí habían tambien algunos ignorantes que bien se pudieron haber engañado.
La CIA, elaboró papeletas con las fotos de los candidatos y con ellas se acercó al pueblo, diciéndoles: ¿Saben por quién deben de votar? la respuesta fue: ¡El voto es secreto! y ellos dijeron: ¡Es cierto! ¡pero no quiero que me digas por quien votarás, lo que nosotros queremos es ayudar a que llegue al poder el mejor, pues entre los candidatos hay uno malvado, corrupto, quien ha vendido su alma al diablo, para las elecciones lograr ganar y nosotros debemos eso evitar, pues de llegar ese malvado a la presidencia ya nos llevo a todos junto a él, al mismo infierno! en otras palabras; ¡ya nos llevó el diablo! 

Los campesinos, asustados preguntaron sin nunca decir por quien votarían, pues eso era secreto y sagrado, los enviados por la CIA, ésto dijeron:
¡Es éste, el general! ¡y para evitar que llegue a la presidencia, debemos de tacharlo con una equis, en señal de repudio, para que el tribunal electoral sepa que el pueblo no lo quiere! Los campesinos y demás pobladores quedaron mudos y aterrados y luego de meditar lo que su compatriota leal habia descubierto, repitieron: 
¿Lo tachamos con una equis, para que sepan que yo no lo quiero como presidente?
¡Así es, eres muy inteligente! 

Y el día de las elecciones llegó, todos o al menos la mayoría de esa nación al ver al general en la papeleta lo tacharon con una equis, como repudio y rechazo, por hacer tratos con el diablo, para que éste no ganara las elecciones. Pero cuando éste ganó todos seguro en silencio repitieron: ¡Ganó el cachudo y su alma se llevó a cambio de llegar a la guayaba! ¡nuestro presidente es hombre malvado a pesar de que yo proteste y con una equis lo taché, el diablo lo sentó en la guayaba!

La CIA, regresó a su país, siempre con ganas de en las próximas elecciones compartir sus bien pensadas y planeadas estrategias electorales, pero en ese país ya no los molestaron, pues, recuerden que el general no quería deberles nada a los gringos; que los siguientes fraudes electorales fueron descarados, que nunca más respetaron la decisión de un pueblo. 

Cualquier similitud con tu país, es pura coincidencia o mano de la CIA, quien también ahí estuvo metiendo su cuchara, para evitar que ideologías extranjeras llegaran a romper la soberanía de tu nación. Hoy día, siguen haciendo con nuestro voto lo que desean, buscan a personas con casaca y presencia arrolladora, algo que los hace ser ganadores indiscutibles, debido a su presencia y carisma y facilidad de palabras, tipos embaucadores, pero éstos, que solo tienen lo dicho; son marionetas de los mismos de hace siglos. 

  "Pueblo, despierta y toma por derecho tu lugar, el que te corresponde, si es necesario lucha por que tu voto se respete".    

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