lunes, 17 de agosto de 2015

La Ley


- ¡¡Siguientes!! dijo el secretario del juez de aquel lugar, afuera un par de esposos, como de unos treinta años de edad aproximadamente; ellos se pusieron de pie y caminaron hacia la oficina, lugar en donde les esperaba el señor juez.
- ¡Caso: 166333, los Chávez contra el estado. Indico el juez, mientras leía un documento.
- ¿Y su abogado? les pregunto el anciano, sosteniéndose los lentes y viéndoles sobre ellos; mientras, ella abrazaba duro el brazo de su esposo y ambos con la vista puesta al suelo en señal de sumisión y respeto.
- ¡No tenemos su señoría, nadie quiso tomar nuestro caso!
- ¡Esta bien! dijo el juez colocando sus anteojos en su lugar una vez más; a un lado el secretario tomando nota de lo que ahí sucedía.
- ¿Veamos? dijo el anciano; _¡bla bla bla y por ello solicitamos a usted señoría nos autorice a poder tener otro bebe! El anciano de nuevo los vio sobre los anteojos y les dijo.
- ¡Lamento mucho la muerte de su hijo, pero ustedes conocen la ley, ésta es muy clara en su articulo... párrafo... inciso... Allí dice claramente, que cada pareja solo puede tener un hijo y si tienen otro, serán condenados a muerte, los padres y el niño lo tomará le estado y lo pondrá en adopción, para aquellas parejas que no pueden tener familia! _ ¡cómo ven, la ley es muy clara!
- ¡Si señor juez, es muy clara, pero pensamos que en nuestro caso podría hacerse una excepción, su Señoría! El anciano los vió con tristeza en sus ojos.
- ¡Pero la ley es clara y nadie está sobre ella... Lo siento mucho, pero su petición es denegada! ¡Caso cerrado!
- ¡¡Siguiente caso!! gritó el secretario, mientras la pareja salía de la oficina con la decepción en el rostro del padre y lagrimas en la madre.

      La ley es clara y nadie está sobre ella; eso hemos escuchado tantas veces, en cualquier caso en donde un ciudadano quiera solicitar algo de poca importancia o de mucha relevancia. ¿Pero quien escribió las leyes y dijo que nadie era superior a ellas.?  
Sí con desilusión vemos que a diario nuestros políticos se las cogen (perdón: Violan) siendo ellos los garantes de que se cumplan, son los primeros en no obedecerlas; serán éstas superiores a las de nuestro Señor. Recordemos que Él mismo dijo: "Al César lo que le pertenece y a Dios lo que es de Dios" 

Pasaron los días y la joven pareja, quienes habían perdido a su único hijo deseaban tener otro, solo otro, para que su vida fuera mejor y el dolor de su hogar se marchara lejos. Luego de varios meses de ahorrar, más los que desde casados habían logrado reunir para su casa adquirir, decidieron de ese lugar salir; pidieron la visa a un país en donde pudieran vivir en paz y sin leyes absurdas para ellos y cuando la tuvieron, tomaron pasaportes y de ese lugar se marcharon, al aeropuerto sus más allegados y familiares. Las cámaras de vigilancia, que por ley estaban por doquier, para vigilar a la población y otorgarles protección, eso citaba la ley de las cámaras en alguno de sus párrafos e incisos.
Al llegar a su destino, se colocaron y buscaron un trabajo para poder sobrevivir ahí, otras costumbres, otro idioma, otras caras y lo peor otras leyes.

     ¿Quién dictó las leyes de cada lugar, a quien se le dió esa potestad?, la de decidir la vida del que en ese lugar viva, ¿quien es el padre y madre de las leyes? Le llaman carta Magna, Constitución, y en ella están las directrices de como el ciudadano que ahí viva debe vivir. 
Y vaya si la ley tiene poder, un poder tal cual el mismo Dios, pues en algunos lugares, la ley decide quien vive y quien muere, quien puede o no parir un hijo o abortarlo, nadie puede hacer nada contra lo que ese papel dicta a la sociedad. 
Dicen que la ley es hija de la democracia y que ésta nació en Grecia, toda una historia bíblica.
Algunas leyes se han acomodado de un lado de la balanza y en la otra la corrupción que hace que esta queda horizontal, pues es justa para unos e injusta para otros, la vuelven prostituta, pues con dinero le colocan una coma o un punto y el sentido es retorcido a conveniencia del poderoso, mientras el miserable que no puede comprar ni una pinche coma, se conforma en escuchar: "La ley es clara en su articulo..."

Los Chávez, en aquel lugar lograron hacer vida y procrearon tres hijos, ellos eran muy felices en ese lugar, tenían un lugar para vivir, dinero para alimentar a sus pequeños niños, vivían con comodidad y tranquilidad, respetando todas las leyes de ese lugar en cuya constitución no existía esa restricción de no tener más de un hijo, el sueño de la familia Chávez era uno hecho realidad. Por cartas sus parientes de su lugar natal, de donde eran originarios, se enteraban de la dicha de quienes una vez sufrieron por la muerte del único hijo que ahí podían tener, pues así lo ordenaban las leyes de aquel lugar. Tal vez tuvieron sus razones y todos lo aceptaron así y desde que esa ley nació, siempre fue respetada, nunca violada, pues su violación se pagaba con la vida.

     ¿Y si solo se respetaran las leyes propias del lugar en donde todos vivimos?, me refiero al planeta, el que nos aguanta y del cual hacemos lo que se nos viene en gana y hasta lo estamos matando; pero para eso no hay leyes, ¡vaya babosos, hacemos leyes para tener subyugado a un pueblo, pero no para proteger al único hogar que tenemos, único lugar en donde la raza puede sobrevivir! 
Pero las leyes para la deforestación han sido completamente violadas por los ambiciosos que tienen fortunas, pero quieren más. Deberían de hacer una ley, con un tope de fortunas y el resto que éste o éstos produzcan, se les confiscará para darle alimento a los que mueren de hambre y no tienen un lugar digno para vivir. ¡Ésta si sería una buena ley!

Un día llegó el señor Chávez a casa y en ella encontró como siempre a su esposa y a sus amados hijos, luego de saludar como siempre a todos, él observó a su esposa muy triste con un papel en sus manos.
- ¿Qué es ésto mujer? le quito el papel de sus manos; en el decía, que deberían de presentarse a migración pues, era ley de ese lugar presentarse cada cierto tiempo y así ampliar su estadía en un país que no era el de ellos, al menos eso dice la ley de ese país.

     ¿Y si un día la naturaleza y sus leyes se hicieran respetar y le exigieran al hombre que deje de chingar y deje en paz a sus hijos menos afortunados? que los deje de usar como tiro al blanco por diversión, por negocio, uno desalmado, pues según las leyes de la naturaleza éste lugar es para todos los que en el nacemos, tenemos derecho de aquí vivir, de compartir con ellos y los de su misma especie a vivir en paz, tomar lo que ella nos da a manos llenas hasta saciarnos. 
Y es que, hubo un tiempo en que no había nacido éste rey llamado: Ley y se vivía con las que la naturaleza ordenaba y entonces había equilibrio, por lo menos respecto a lo que sí, tienen importancia en el planeta: Aire puro, agua limpia y purificada para todos y ¡gratis!, alimento para la población mundial, solo hay que sembrar una chica semilla y a los meses la tierra te da alimento en abundancia, ¡hermosas leyes!, (suspiro con nostalgia) 
Pero un día, alguien dijo: ¡Ese huerto debe ser mío! y lo tomó a la fuerza y después le dijo al que le quito su huerto: ¡Ahora tomo posesión de esta tierra en nombre de Dios! (vaya descaro) y después, para evitar ser asaltado por el que fue dueño de aquel lugar; lugar que le tocó, éste, el ladrón, le colocó un cercado y luego fueron dos, tres y mil, hasta que un día dijo: ¡Todo ésto me pertenece! 
Y con otro poderoso se encontró y ahí tuvieron su encontrón y al ver que ni uno ni otro podía dominar y subyugar a su poderoso enemigo, decidieron dividir el inmenso lugar y acordaron que uno se quedaba con el lado éste, el otro con el oeste y aparecieron otros, que se quedaron con el norte y el sur; y todos ellos lo decidieron y lo dibujaron en papel, como constancia de lo que le pertenecía a cada quien e hicieron sus fronteras y acordaron que nadie podría pasar al otro lado de ellas, pues los otros tres matarían al que lo hiciera y tomarían lo que le había tocado a éste y sus tierras se dividirían entre ellos. 
Así empezaron las fronteras y los países, los cuales llevaban como nombre, los nombres o apellidos de los poderosos o ladrones que empezaron despojando a los débiles que ahí quedaron trabajando para el que los conquistó y entonces cada quien ordenó sus condiciones para poder vivir ahí.
¡Y el que no le guste que se largue de aquí, porque mi palabra y lo que digo es la Ley en éste lugar! Y ahí nació: La ley.

- ¡¡Siguientes!! grito el secretario de la oficina de migración y caminaron hacia la oficina los Chávez, la mujer abrazada del brazo de su marido; al entrar, un anciano los vió y el papel leyó, luego sobre sus lentes a los Chávez miró y les dijo.
- ¡Se les ha vencido su visa y la ley es muy clara en su articulo... párrafo... inciso...
- ¡Por lo tanto y con la autoridad que la Ley me dá, los deporto a su lugar de origen!
- ¿Tienen algo que decir en su defensa? dijo el señor juez viéndolos sobre sus lentes.
Los Chávez le contaron todo al señor juez; su triste historia y lo bien que ahora vivían en ese país. El señor juez los vio sobre sus lentes, ésta vez vio a su secretario y éste se acercó al señor juez y en secreto hablaron, luego de unos segundos hablando, el secretario se retiró y el señor juez se dirigió a los Chávez...

     ¿Quién dijo y con qué autoridad que en la ley estaba? en uno de sus artículos, párrafos e incisos ridículos, que un hombre era propiedad de otro hombre, solo por tener otro color, uno inusual, uno diferente y por ello, según las leyes, éstos fueron esclavos y violados en todos sus derechos humanos y, bueno el resto es historia; una muy oscura y vergonzosa que habrá que olvidar más no borrar, para que no se vuelva a repetir.

El señor juez vio a los Chávez y su pulso se agitó cuando les dijo.
- ¡Lo siento señores Chávez, pero la ley, es la ley y nadie esta sobre ella, y en su caso la ley es muy clara; como lo indica en su: Artículo... párrafo... inciso... bla, bla, bla, les leyó la ley de migración de ese país...!
- ¡Por tanto los deportaremos a su lugar de origen! ¡caso cerrado!
- ¡Pero señor juez! ¿y nuestros hijos...?
- ¡La ley es muy clara y acá dice en el articulo... inciso del ...! ¡Los niños por ser nacidos en este país son ciudadanos de este lugar y ustedes, los padres por ser menores de edad, deciden si se los llevan o si los dejan! ¡Si los dejan serán tomados por el estado y puestos en adopción! 
- ¡Lo siento señores Chávez pero la ley es muy clara, nada que hacer! y repitió: 
- ¡Caso cerrado! y el oficial los arrestó y a su país los deportó, mientras sus hijos los tomó el estado para ponerlos en adopción.

    ¿Qué se hace, si no somos superiores a las leyes? que como dije antes, el que las dictó nunca tomó en cuenta minucias, cosas sin importancia para el estado, ellos vieron lo que les convenía a ellos y a sus compañeros los políticos y adinerados y el resto que se hagan al sistema y agregaron; en el camino la vamos acomodando según las necesidades. Mientras eso sucede, muchos habrán de morir; como lo cuenta la historia.

Al llegar los Chávez a su hogar, su lugar, su país, eran esperados por las autoridades de migración de aquel país, en alguna parte del globo terráqueo. 
Y los arrestaron y de inmediato fueron llevados frente al juez para que éste hiciera respetar las leyes de ese país.

- ¡Caso 16663333 Los Chávez contra el estado! grito el secretario y ellos fueron llevados frente al señor juez, quien haría respetar las leyes de aquel país,.
- ¡Veamos! dijo el viejo señor juez... ¡Bla bla bla bla bla...! 
- ¡Wao, vaya que han infringido muchas leyes señores Chávez! el juez los vió sobre sus lentes y al verlos éste entristeció, al darse cuenta que años atrás los tuvo frente a él. Luego de un breve silencio, éste dijo.
- ¿Son ustedes otra vez?
- ¡Si su Señoría y apelamos a su justa decisión! ¡en sus manos esta nuestro futuro! 
- ¡Aquella vez perdimos un hijo, ahora perdimos tres señor juez, apiádese de nosotros!
El señor juez se quitó sus anteojos y se limpió el sudor de su frente y en sus ojos una lagrima brilló y, ésto le dijo a los Chávez luego de colocarse los lentes.
- ¡Vean señores Chávez la ley es muy clara, en su articulo... párrafo... iniso... bla, bla, bla, bla!
- ¡Y nadie esta sobre la ley! ¡por tanto los condeno a la pena de muerte...! 
- ¡Caso cerrado! y los Chávez; uno por una puerta y la otra por otra puerta, sin dejar de verse, con la mirada se decían cuando se amaban.
Al cerrar ese caso el anciano señor juez se levantó y a su oficina se dirigió a escribir su renuncia como juez.

   ¿Qué se hace? si las leyes son muy claras, pero no para todos, se dice que es ciega y ¡sí lo es! y su balanza esta chueca, esta viciada, para inclinarse siempre hacia el lado del que más tiene, del poderoso que la inventó y sus artículos dictó. Para casos especiales, las colocan ambiguas para que los estudiados en al materia puedan hacer que su cliente, sea un asesino confeso, quede en libertad y para que aquel que robo un pan, porque sino moriría de hambre, sea condenado. 
A veces, solo le colocan un signo de puntuación y todo el significado del párrafo de aquel articulo es modificado y en ese instante la balanza se inclina para el lado equivocado y la señora ¡buenota! con venda en los ojos, si la vez bien esta guiñando el ojo al tranza que no es otro más igual de tranza que ese sistema que desde siglos quedó así planeado, para poder decir; todos serán medidos con la misma vara, pero sabemos bien que eso no es así. 
Éste tema da para mucho, mucho más, pero esa será otra historia, pues lo indica la ley y habrá que respetarla porque nadie es superior, a la diosa llamada: Ley. 





No hay comentarios.:

Publicar un comentario