jueves, 3 de marzo de 2016

Pobre corazón


Se que tengo una extraña expresión, tal vez veas un profundo temor, 
busco en la luna a un gran amor y me encuentro con un cielo estrellado 
y en su profundidad, un enorme vacío, igual al que hay en mi corazón.

Te pienso y me ilusiono, mariposas en mi estomago, pero eso nada más, una gran emoción. 
A veces grito al cielo, en esa gran oscuridad, parecida a la de mi corazón... ¡Hazme el amor!

Luego reaccionó, que aun no te encuentro y lloró desilusionado por encontrar el amor. 
Seré un solitario para siempre? será mi destino no hallar ese amor? 
Alguien que ayude a un pobre corazón que muere de amor en soledad. 

La profunda oscuridad de un cielo sin luna, vacío infinito y un enorme temor 
que lo acompaña tremendo dolor. Desespero con facilidad, me desilusiono y lloró, 
veo al cielo y a la luna escondida entre nubes negras. 

Veo así mi destino y comparo a la luna con mi corazón, atrapado entre un gran dolor 
que lo representan las nubes grises, que detienen su gran esplendor, me siento condenado 
en vida, sin medida sustitutiva y eso me atormenta aun más.

Sigo gritando: ¡Hazme el amor! quiero liberar toda emoción, conjugada con mi pasión, 
sentir caricias, aunque sean ficticias, cierro mis ojos y me engaño; mi cuerpo si reacciona 
pero como engañar a mi corazón, quien sufre más que yo sin un amor.

Se siente estallar, con esa rara presión que te da el tener adentro tanto amor 
y no poder entregarlo a nadie. 

Será que ya nadie busca amor? solo pasión y vana ilusión, cuerpos en explosión y satisfacción, luego sonríen, se dan las gracias y cada quien para su casa. 

Pertenezco a otro tiempo, maldita mi suerte, llegar a este mundo en otra estación, otra generación, que carece de la conjunción que da la perfecta armonía de amor y pasión.

El cielo sigue oscuro aunque lleno de estrellas, como mi corazón sin luz y todas sus estrellas son mis ilusiones, mis esperanzas de encontrar un día el amor, sentirse amado por otro ser igual que yo, que piense como yo, que deseé ser amado con esa rara pasión que hoy día ya quiza murió.

Mis ojos, siguen con esa expresión, un vacío infinito y tremendo temor de salir cada noche y no encontrar nada de amor. Siento que muero cada noche con las ganas de encontrar tu amor, ese amor que hoy no existe más. 

Ilusiones nada más y mariposas que me hacen volar en ese vacío de amor, me llevan a prisión y esa condena no tiene medida sustitutiva. yo grito: ¡Alguien que ayude a mi pobre corazón que muere de amor!

Por sentir una leve caricia, una que sea honesta, con una pizca de amor y pasión, pero sigo como el oscuro cielo, que aunque tenga miles de estrellas brillando; más allá, sigue siendo un lugar vacío y oscuro.

Por ello, envidio a la luna, que cada noche brilla igual que lo hago yo en busca de alguna ilusión o de un trío que le cante una canción. 

Si pudiera suceder, sería un milagro, algo inusual, algo anormal, una historia de cuento de hadas nada más; el que ella y yo pudiéramos amarnos, como ella y yo lo deseamos y lo ansiamos.  Ilumina a mi oscuro corazón y yo girtándole: ¡Hazme el amor! 

Emocióname con un amor y pasión, algo que ya no se acostumbra, que quizá ya murió hace mucho junto a ti luna y a mi pobre corazón, que ya no aguanta más, por contener a tanto amor que nadie quiere.

Una agonía es mi vida o una maldición, el verte y no tenerte, que brilles para mi cada noche y que nubes grises te aprisionen como me lo hacen a mi y lloró por mi pobre corazón que cada noche muere deseoso de amor y pasión, la perfecta conjunción.

Lobo me siento, gritando a la luna: ¡Hazme el amor!, acaricia mi corazón, que muere junto a mi esperando una caricia de amor. 

Amor y pasión que hoy no se logra encontrar, a esa conjunción le dicen vana ilusión. Amantes simplemente entregándose placer, luego se ven a la cara y se dan las gracias y complacidos regresa cada quien a su casa. 

Otra estación, otra generación, no es la que yo debí vivir, debo tal vez morir, para así volver y encontrar lo que no tengo hoy acá, lo que no encuentro en este lugar. 

Quiero volar, mariposas en mi estomago que me dan ilusión, ayuden a este pobre corazón en su encuentro con otro ser que vive en soledad al igual que yo, deseando escuchar una bella canción...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario