viernes, 27 de mayo de 2016

MUJER 3


Eres divina y traes en tus labios 
un veneno tan particular,
uno que al probar te mata lentamente, 
te ataca primeo el corazón, 
luego entra en el torrente sanguíneo 
y llega a tu cerebro, produciendo 
que uno se vuelva un completo idiota.

Tienes ojos que fascinan 
bruja debes de ser,
yo veo en ellos una luz 
que iluminará mi vida,
luz que cuando se va 
nos deja en tremenda oscuridad;
hombre caminado entre tinieblas 
así quedo cuando tú te alejas,
rompes mi corazón y dejas 
una huella que nunca
borraré de mis recuerdos.

Tienes el porte del más raro ejemplar
digno de que te llamen majestad
y te traten como una reina, solo pides 
y eso para mi es una orden que debo cumplir
pues de no hacerlo puedo morir 
condenado por la corte del Rey Arturo.

En tu linda piel siento un palpitar
uno que recita a bella canción, 
con acordes que me harán mover 
a tu antojo mujer.

En tu piel, el perfume 
más delicioso y lujurioso,
uno que me vuelve loco 
y pierdo la cordura,
no puedo alejarme de ti, 
pues podría yo morir al no sentir 
tan excitante y agradable olor.

Conoces muy bien 
el arte de conquistar
tienes las mejores armas 
para desequilibrar y desarmar 
al más poderoso de los ejércitos, 
nada se puede hacer
cuando enfilas tus atributos 
contra mi, bella mujer.

Un movimiento de tus parpados 
o uno de tus hermosas piernas 
y no se diga de ese andar, (caminar)
quien podría contra ti ganar, 
iniciada la batalla ya soy un perdedor, 
saco mi pañuelo blanco 
pues a tus pies ya estoy rendido, 
divina mujer.

Mujer, 
nombre que viene de no se donde
pero que cuando lo escucho 
todo mi cuerpo vibra de amor 
y de pasión y tambien de deseo,
el sonido que esa palabra 
en mi boca provoca
hace vibrar mi paladar 
y transforma mi lucidez en idiotez.

Hechizado me tienes, tambien embobado,
por ti haré lo que fuere, 
por sentir una simple caricia
de tu corazón para mi corazón.

Y si pruebo de tus labios un beso
ya podré morir, pues entró en mi cuerpo
ese veneno que no tiene antídoto 
y que ataca a mi corazón,
luego se muda a mi cerebro y mis recuerdos,
haciendo una imagen inolvidable 
me vuelvo insaciable ser
deseando saborear tu sabor 
y olfatear tu aroma de mujer.

Ese perfume que nace 
en cada uno de tus poros,
dime que hago para vencer 
las armas que te dio
la madre naturaleza, 
nada mejor que rendirse ante tí.

A tu porte majestuoso 
y caer a tus lindos pies rendido,
nada hay en ti que me pueda no gustar 
y no se diga algo que me pueda aburrir 
de ti... Bella Mujer.







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